El Evangelio en Romanos y Galatas Lección #3

                                                    Tema: La justificación por la fe

Versículo clave: Galatas 3:11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá;

Lectura: Romanos 4:3-5 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia. 4 Pero al que obra, no se le cuenta el salario como gracia, sino como deuda; 5 mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia.

Galatas 3:6-8 Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia. 7 Sabed, por tanto, que los que son de fe, estos son hijos de Abraham. 8 Y la Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones.

Romanos 4:13-25  Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de que sería heredero del mundo, sino por la justicia de la fe. 14 Porque si los que son de la ley son los herederos, vana resulta la fe, y anulada la promesa. 15 Pues la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión.

16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros 17 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen. 18 Él creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. 19 Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara. 20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, 21 plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido; 22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia. 23 Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, 24 sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro, 25 el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.

Galatas 3:26-29 pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; 27 porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. 28 Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. 29 Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa.

Introducción: Hoy son muchas las personas que se hallan bajo la condenación del pecado. Aunque no conocen a Cristo como salvador, si comprenden que su estilo de vida no agrada a Dios. En un intento por agradarle, tal vez participen en diversas actividades comunitarias que ayudan a los necesitados. Tienen la esperanza de que al final de su vida sus buenas obras de alguna manera superen cuanto mal puedan haber hecho en la vida.

No es asi como se puede tener una adecuada relación personal con Dios. Las buenas obras nunca podrán ganar a una persona esa relación con Dios.

Esta leccion examina la forma en que el hombre puede ser justificado ante DIOS por medio de la fe en Cristo. Deje que el Espiritu Santo ponga seguridad en su corazon mediante esta verdad de su palabra. 

I. La justificación es un don. Romanos 4:1-8; Gálatas 3:6-14

Los judios de los tiempos de Pablo estaban orgullosos de su herencia y señalaban a Abraham como padre suyo. Pablo uso a Abraham como ejemplo de lo que significa tener una debida relacion personal con Dios (Romanos 4:1-3) Cuando la justicia procede de las obras. La persona se jacta de ellas. La justicia de Abraham no era consecuencia de la obediencia a la ley, si no de su fe en Dios. 

En los versiculos 4 y 5, Pablo usa una ilustracion tomada de la vida diaria para demostrar que la justicia recibida de Dios es un don de su gracia. Si la persona se apoya en las buenas obras en cuanto a su justicia. ya no se trata de un don. si no de una paga.

David sabía lo que era experimentar la libertad de la culpa que proporciona la justificación (vv. 6-8) Cuando confesó su pecado, experimentó por fe la justicia de Dios. Las buenas obras no le podían obtener ni ganar el perdón que necesitaba. sino sólo la gracia de Dios. 

Hoy hay quienes experimentan la culpa que trae consigo el pecado. Buscan librarse de ella tratando de cambiar de conducta. o tienen la esperanza de que sus buenas obras pesen mas que las malas.

Es posible que un creyente piense que merece aun la condenación porque se considera tan malo que no hay manera de que Dios lo perdone. sin embargo, ser justificado significa que el cristiano comparece como justo ante Dios porque Jesus pagó ya su deuda. 

Pablo usa tambien el ejemplo de Abraham al enseñar a los creyentes de la Galacia acerca de la justificacion. Los judios llamaban padre a Abraham. porque era su antepasado. Ahora, gracias a la obra salvadora de Cristo. los que creen en él. son los verdaderos hijos de Abraham. tanto judios como gentiles (Galatas 3:6-9). El plan eterno de la salvación siempre ha incluido a los gentiles en la mente de Dios.

El hecho de que los impíos puedan ser justificados proporciona esperanza a los que no son salvos. No necesitan ganarse su propia relación personal con Dios. Pueden acudir a Cristo para ser justificados por fe.

En el versículos 10- 12, Pablo señala un problema cuando alguien trata de justificarse por guardar la ley, los que siguen la ley se hallan bajo una maldición (Deuteronomio 27:26). Porque nadie podía guardarla en todos su detalles. Hata los profetas mismos comprenden que la justificación venía por la fe y no por el cumplimiento de la ley (Habracuc 2:4). 

Cristo, por medio de su muerte en la cruz, redime a los hombres de la maldición de la ley (Galatas 3:13). El murió para justificarlos y para proporcionarles la vida llena del Espíritu (v.14) Cuando estamos en una adecuada relación personal con Dios, podemos  andar en el Espíritu y dejar que El rija nuestras vidas.

II. La justificación esta prometida a los creyentes . Romanos 4:9-15

Abraham no fue circuncidado sino hasta después de expresar su fe en Dios (Romanos 4:9-10). porque fue justificado por fe, es llamado padre de todos los que creen en Cristo. tanto si son judios como si son gentiles (vv. 11,12). 

Cuando Pablo dijo que Abraham sería “heredero del mundo” (v. 13). estaba esperando el cumplimiento del plan eterno de Dios. Todos los que creen en Cristo participan de esa herencia. porque serán hechos reyes y sacerdotes. y reinaran con el (Apocalipsis 5:10) 

La ley no podía hacer heredero a nadie, porque no tenia el poder de dar vida eterna. Si la persona se pudiera ganar su justificación. la fe no tendría valor alguno y la muerte de Cristo habría sido en vano (v.14)

Porque el pecado es la transgresión de la ley, si no Hubiera ley no habría transgresión, pero la ley existe. y como consecuencia. acarrea ira sobre aquellos que desobedecen (v. 15)  

Los creyentes pueden disfrutar de la justificación que tienen en Cristo. Estan libres, de la ira que cae sobre todos los que no conocen a Cristo. Sin embargo, mas aun, estan libres para servir a Dios en el poder de su Espíritu. 

III. Crea la promesa. Romanos 4:16-25; Gálatas 3:19-29 

La promesa de justificación es un don de la gracia (Romanos 4:16). Todos los que ponen su fe en Cristo pueden ser justificados. 

Cuando Dios prometió a Abraham que seria “padre de muchas gentes” (v. 17) él y Sara no tenian hijo alguno. pero creyo en el Dios que “da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen” (v.17).

 No centró su pensamiento en la edad que tenía, ni en la esterilidad de la matriz de Sara (v.19)esto habría debilitado su fe. se centró en la promesa de Dios, y su fe fue fortalecida (vv. 20, 21). El Dios que creó el mundo podía dar vida a aquello que estaba muerto

El hecho de que Dios acreditó su fe de Abraham como justicia. nos da esperanza (vv. 22-25). podemos emular (imitar) la fe del patriarca confiando en que Dios nos justifica. podemos confiar en que la obra de Cristo en la cruz nos justifica ante Dios

La ley no tiene poder para evitar el pecado. ni para dar vida espiritual, Habia sido promulgada para mostrarle al pueblo que era pecador. (Gálatas 3:19-22) 

Cuando comprendemos que no podemos estar a la altura de las exigencias de justicia que tiene Dios. vemos que necesitamos la salvación por medio de Cristo.

Pablo describe la ley como un “ayo” (v.24). La palabra griega traducida como “ayo” se refiere  a un esclavo que era el asistente personal del hijo de un amo. Acompañaba al niño dondequiera que iba. y ejerce un cierto grado de disciplina sobre el. Cuando el hijo grecia y se hacia adulto. ya no se necesitaba al esclavo. De igual forma. ya no se necesita la ley, porque la fe en Cristo ha venido para llevarnos a una adecuada relación personal con Dios (vv. 25,26). 

Cuando nos acercamos a Cristo. somos “bautizados en Cristo” (v. 27). Somos sumergidos en el. y anhelamos que nuestra vida sea sometida a su gobierno. porque él está en nosotros. crece nuestra unidad con los demás creyentes (v.28) Ya no hay división. porque estamos en Cristo. 

conclusión: Tal vez. mientras usted lee o escucho esta enseñanza, el Espíritu Santo le hablaba acerca de su situación espiritual. La culpa por sus pecados le parece abrumadora. se pregunta si alguna vez podra quedar libre de esa culpa. hasta es posible que trate de racionalizar su conducta para disimular su sentido de culpabilidad.

La única forma de ser libre respecto a la culpa del pecado, consiste en aceptar a Cristo como su salvador. El le ofrece la manera de tener una adecuada relacion con Dios por medio de su muerte en la cruz. 

Es Posible que usted sea cristiano, pero se siente condenado a causa del estilo de vida que tenía antes de aceptar a Cristo. Él le proporcionó todo cuando usted necesitaba para ser justificado ante Dios. no permita que el enemigo lo haga sentirse condenado. Crea las promesas de justificación que se encuentran en los textos de hoy y gocese en la justificación que tiene en Cristo.